Mañana es el primer espacio en blanco para escribir un libro de 365 páginas
Ahora que nadie me escucha, ahora que ninguna persona pondrá voz a estas palabras semianónimas llenas de polvo acumulado, MDMA, purpurina, uvas, speed y mucho miedo (algo así como la mezcla para crear a una Frankenstina en su versión alternativa) quiero decir que:
Tengo miedo. Sí, miedo. Estoy acongojada, acojonada y todo lo que empiece por ACO y signifique miedo. ¿Miedo a qué? Sí, supongo que debería explicarme para darle sentido a estas palabras dignas de psicópata. Tengo miedo a todo lo nuevo que esta por venir, a esta etapa, que será difícil olvidar aunque aún no se si por bien o mal. Siempre he sentido pánico ante los finales y los nuevos comienzos. Ante lo desconocido. Y eso es algo que nunca desaparecerá por mucho que sople las velas o me atragante con las uvas.
No te preocupes, es natural tener miedo.
ResponderEliminarPero es un auténtico fastidio.
EliminarHola A,el miedo de los finales yo lo veo como una despedida también de una parte nuestra que también se despide y los comienzos es una parte todavía por exlorar de cada unos de nosotros..no sé, despidámonos o intentemos hacerlo honestamente y no tengamos más miedo a lo que venga que a nosotros mismos, yo le veo una cierta unión..
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