De todo un poco
Como muchas otras veces, ha llegado a un punto tope de inflexión en el que todo la satura y no puede sino retraerse en sí misma y esperar que pase la tormenta. Está cansada de todo: de lo políticamente correcto, del quiero pero no puedo, de gestos desaprobatorios, reproches infundados, derechos, deberes, miradas que matan, falsa empatía, arrepentimientos de lo que pudo ser y no llegó, de sus estúpidos miedos que la impiden correr hacía sus sueños…en fin, de todo. Hasta de ella. Sobre todo, se siente exhausta porque aunque lo intenta, no consigue borrar esa naturaleza cobarde que la caracteriza. Aún sabiendo que solo es una espesa capa que envuelve un corazón rebelde.
Si tuviera palabras para describir lo mucho que me identifico con este texto las escribiría, pero todo es poco para decirte lo mucho que me ha llegado.
ResponderEliminarEstoy en una época totalmente idéntica a la que describes aquí. Harta de todo, y sobre todo de mi naturaleza humana que me impide hacer lo que de verdad quiero: romper con todo y huir, aunque sólo sea por unas horas, de mí misma.
Gracias por escribir algo así y por hacer que no me sienta tan sola con ese sentimiento en este frío Enero.
"Aún sabiendo que solo es una espesa capa que envuelve un corazón rebelde."
Sin duda enero está siendo devastador.
EliminarEl ser humano es difícil de tratar por naturaleza. Nadie es una excepción. Sin embargo la propia persona elige si caer en su propia trampa o no. Algunos se mienten a si mismos, otros no quieren ver. Tú simplemente has decidido ver. La vida es tirarse por barrancos.
ResponderEliminar¿Ver? Preferiría tener los ojos cerrados.
EliminarSimplemente no eres capaz.
EliminarCoincido contigo, a veces por mucho que intentemos poner todo nuestro empeño a favor de los acontecimientos. Lo que sucede a nuestro alrededor nos abrasa.
ResponderEliminarPero siempre salimos de todo, recuerdalo.