Pss pss

¿Te gustaría quedarte?
Haz click aquí para seguir este blog.

.

.
Con la tecnología de Blogger.

Búsqueda

Escribe abajo lo que quieras buscar y presiona Enter

viernes, 4 de julio de 2014

La reina de las ranas no puede mojarse los pies

        


















El polvo se acumula en los rincones, pero eso no es excusa suficiente para no admirar lo que esto fue, lo que ha sido, para ti, para mí, para todo lo que una vez fuimos porque si observas atentamente aún se pueden ver pequeñas figuras danzando en el aire al ritmo pausado de aquellas melodías que por siempre resonarán en nuestros corazones, convertidas ya en ecos lejanos del pasado. Sí, me embarga la melancolía, para qué negarlo. Ya sabes que siempre me gustó regodearme en esos momentos tan melodramáticos, como si todo fuera una película y nosotros simples actores de segunda sobreactuados. Y espero que me disculpes, ¡es que a veces es tan fácil confundir realidad y ficción en un escenario tan pequeño! Por eso espero que también entiendas que aunque siempre digo "¡nunca más!" al final acabo regresando al mismo lugar, retrotrayéndome a esos momentos en que los recuerdos no eran en blanco y negro sino que fulguraban con colores brillantes y el silencio no lo cubría todo. Así que una vez más estoy aquí viendo como el orgullo y el tiempo lo cubren todo. Pero hoy sé que tú tampoco has olvidado y que mis huellas no son las únicas huellas porque, al fin y al cabo, mis recuerdos no son los únicos recuerdos. Y quien sabe, querida amiga, quizás una vez más esos recuerdos nos obliguen a encontrarnos.
Compártelo si te gusta:    Facebook Twitter Google+